30 de noviembre de 2015

El mundo del perro

¿Acaso se juega en la política otra partida que la gestión total de los hábitos del cuerpo? La religión funciona como una máquina de niebla sobre esta intención, cuando no constituye su más elaborada y coherente expresión.

2 comentarios:

Gregorio Luri dijo...

Pero hay alguna gestión no política de los hábitos del cuerpo? Política y hábito no son sinónimos?

Martín López dijo...

Déjeme que me lo piense, a ver si me aclaro con la lógica de lo que quise poner... Quizás tenía la idea de que la política se ocupa, aparte, de la gestión de las almas. En un sentido no religioso, ça va de soi...