26 de marzo de 2011

Tarde

En el campo, tranquilo, sesteando...

No resulta nada despreciable el sentido de la justicia. Si los seres humanos han de poder mirarse a los ojos, y no de arriba abajo ni de abajo arriba---

A veces dan ganas de salir corriendo.

Sin fiebre pero incapaz de pensar. Mejor lo dejo... Lo de pensar.

Observo, curioso, que cuando no puedo pensar bien (ejercer mi oficio de filósofo, ser inteligente*) soy capaz de expresar cosas sensatas. Afortunadamente se me pasa y vuelvo a lo otro. Ahora bien, ¿qué es lo otro? ¿Me permite arreglar cosas?

*Puede Vd. sustituir la ","  entre "filósofo" y "ser" por un "=". Esta nota, por un acto de ironía, ≡ a la sonrisa que no me ve y que yo le estoy dedicando.

8 comentarios:

Juan Fco Romero del Castillo dijo...

Estimado señor: Espero que esté usted corrigiendo los exámenes que tan ansiosamente realizaron sus alumnos el pasado viernes. Sin ánimo de reinventar los comentarios a modo de email, direle que considero que cederle media hora de mi clase a su asignatura es lo menos que un aprendiz de filósofo puede hacer. Es mas, creo de que le voy a ceder media hora todos los viernes. Las matemáticas son una ciencia fútil y mis alumnos se valdrán perfectamente sin ella. Pero, sin la Filosofía, ¿qué le queda al hombre sin la Filosofía?

Anónimo dijo...

Si recoges alumnos cedidos quédate también con los míos. s.

Martín López dijo...

En absoluto. Me abruma Vd. Sin duda la amistad que trae el discipulado le hace errar (¿es con h?). La filosofía es materia que no sirve para nada, mientras que la matemática, en sus diversas ramas, es ciencia muy útil y principalísima, para la cual todas las horas son pocas.

Martín López dijo...

Posdata: En cuanto a si estoy corrigiendo los exámenes, la duda ofende, señor mío. Con la misma ansiedad con que fueron realizados. Ya sabe Vd. que yo veo esos documentos y me precipito sobre ellos.

Martín López dijo...

Me abrumáis. Cómo sois los jóvenes en vuestra admiración y respeto a los mayores. Pero ¿qué es lo que van a aprender de un escéptico como yo? Es mucho más lo que vais a poder enseñarles vosotros, que tenéis todas las fuerzas disponibles. Muchas gracias, S. El mismo ofrecimiento te hago: como son de tu generación, o cuasi, puedes aprovechar mis clases y contarles tus experiencias en el insti y en la Universidad. A ti seguro que te hacen más caso que a mí, aunque a mí me adoren (pero es por el respeto y el cariño que me tienen).

Anónimo dijo...

Gracias por lo de "casi", pero mi generación no tiene mucho que ver con la que está hoy en las aulas. Me separa más de una década, aunque aun sea una veinteañera. s .

Juan Fco Romero del Castillo dijo...

Ciertamente, mis alumnos beben. Digo que beben los vientos por mi. En realidad, los liban con una pajita muy estrecha... Lo que más me gusta son los comentarios de admiración que me dirigen durante mi quehacer docente...

Martín López dijo...

¿Verdad que sí? Las tiernas almitas es que se hacen de querer con sus finísimos modales y sin pares pudor y modestia. A mí, si pudieran, me agarrarían de la solapa de la chaqueta para que la clase siguiera un poquito más. Lo que ocurre es que no llevo chaqueta. En el email me dices que llegaron dos segundos tarde. No me lo puedo creer. ¿Ellos? Supongo que será una broma tuya. A mí jamás me ha pasado no encontrármelos a todos sentados y en silencio esperando la lección del día. Seguro que es una broma tuya. Ah, y lo que más sme admira es que jamás, pero ´jamás de los jamases, se quejan por nada.