16 de marzo de 2010

Escuelas

Tienes los años que tienes. Intentas hablar sobre John Locke (oh, sí, sólo te falta la peluca) y te sorprendes, a última hora, de que hasta este momento no hayas leído esta maravilla (P. y yo) de Juan Ramón por un prejuicio absurdo.

3 comentarios:

hegoficcion dijo...

Por favor, pásame la crítica de Locke a 'Platero y yo'. Hace tiempo que está agotada...

Martín López dijo...

Cosa de los horarios... De todas maneras, a los dos les interesan las palabras como nombre o etiqueta de las sensaciones, supongo. Aunque a cualquiera que piense le interesan las palabras como posibilidad o como obstáculo de lo que piensa.

Egoficción dijo...

Masdejao callao.