11 de febrero de 2007

Tesis 18, WB

La tesis 17, encendidamente revolucionaria, ha comprendido la relación total entre sujeto y sociedad -la constitución monádica- a costa del vaciamiento del sentido del tiempo: “la semilla más preciosa, aunque carente de gusto”. Se quiere (?) significar el final de toda una concepción narrativa -progresiva, positivista- de la historia. La contemplación, la theoria, ha muerto, a favor de la fiebre revolucionaria, del salto metahistórico.

***

No habrá de extrañarse el cuidadoso lector por la alegría que produce poder identificar el instante monádico (tiempo-ahora) con la insignificancia cósmica de la historia humana. Insignificante y maravillosa: liberados los hechos de los nexos causales, de su condena a permanecer dentro de la serie del tiempo narrativo (decimonónico), pueden entrar en el lugar de otro sentido muy diferente: revolucionario, mesiánico, novedoso, esperanzado. No la esperanza de poder seguir la serie, continuando con la línea del progreso: sino la promesa teológica finalmente posible -mejor dicho, la venida del dios. Por ello, el tiempo que se abre al futuro es el de la conmemoración: es impredecible, intuitivo, místico.

***

La historia analítica ha muerto. Si es así, ¿cómo razonar con los bárbaros? Éstos participan de la idea de progreso, "trascendentalmente" hablando. Pero no es seguro que resistan la vieja confrontación con los hechos que se conoce como verdad (lo que a su vez conmemora el positivismo lógico, concediéndole el lugar de un ritual agnóstico a la entera escolástica greco-cristiana). Distante la verdad de los sujetos que la conocen, ¿no designa una hermosa figura de la libertad?

***

Ahora que has terminado de leer, deberías volver a leer, porque no has entendido nada.

***

¿Qué es historia?

1 comentario:

Rua dijo...

Verdaderamente para nosotros, seres desensibilizados por el eco temporal, el vaciamiento del sentido del tiempo puede ser encendidamente revolucionario.

Pero lo que no me queda en claro, porque a mí me gusta decir la palabra Yo cada vez que toco mi piano en internet, ¿cómo puede morir la theoría?.

Siempre está el juego del gato que se muerde la cola que nos dice la theoria de la no theoria. además es con un inflar del tiempo con el que ahora escribo.

Ésta ficción llamado yo, piensa que el tiempo es precioso y carente de gusto, pero no podríamos matar a la theoria que por el contrario podia ocupar un lugar agradable junto a las croquetas de mi tía.

Allí todo el tiempo, theoria, lenguaje y pensamiento, esta´rian en una sarten dispuesto a que yo cocinara. Como si fuera un zombi con el que yo quisiera hablar cuando me diera la gana. Cómo si fuera el stand by que dependiera de mi mando a distancia mental.

Para que los barbaros me entiendan y el barbaro que hay en mí tambien deberiamos tener en cuenta las Zonas de Desarrollo Próximo trantando, artísticamente, enriquecer las oportunidades de experiencia dentro de los canones que el contexto de cada barbaro permite.

Yo creo que la historia, la misma palabra lo dice, es historia.

Vuelvelo a leer y entenderás otra cosa. Incluso si vuelves a leer la Tesis 18 de WB.