10 de enero de 2007

Respuestas, WB

Si no lo entiendo mal, la estructura victimario/víctima se mantiene constante. En ese sentido, posee validez cultural, y no se localizan muchas objetividades fuera del mundo de la cultura, y de esa instancia privilegiada y eternizadora (en el intento: en el resultado del juego no nos toca saberlo; pero yo siempre yerro) que es la tradición escrita.

Se trata, me parece, de mantener la vigencia de la condición cainita, lobuna, sacrificial... la sangre detrás del brillo, la ópera y el barro (que ensucia los vestidos). Además, de traer esa condición al primer plano, a la escena, trabar/tramar vida y cultura, etc. Un tema actual (en el sentido inglés, creo, de real, sustancial, constante: actually).

La tarea de la memoria histórica (un trabajo ingrato, y dejemos la ambigüedad de esta "ingratitud"), hic et nunc, podría reescribir el final de la Tesis 6 de WB: "... tampoco los muertos estarán seguros ante el enemigo cuando éste venza. Y este enemigo no ha cesado de vencer". No digo suscribir, sino reescribir, aplicar las palabras marcadas con toda la intención de un peligro mortal: la barbarie histórica, la re-novada del nazismo, el peligro personal de Benjamin, el miedo. Es decir, emplear tópicamente las tesis de Benjamin para los asuntos del día, esa política con minúsculas que luego aparece en los libros de Historia.

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No deja de ser apasionante revivir el quiliasmo en el siglo XX (de la desesperación, la esperanza; de la barbarie, la civilización y la educación para la ciudadanía). Todo para ser empaquetado y cómodamente consumido, es verdad. Se hacen desaparecer del texto (Tesis 6) el "sujeto histórico" y la "clase dominante", y no queda más que ponerles cara de conocidos al mesías y al anticristo, en lo que se deleita la opinión pública/publicada y la opinión política.

Siempre consumidores ¿en las rebajas del saber?

Ojalá pudiéramos entender las tesis siguiendo el consejo-mandato de Luis Wittgenstein: deshacerse de los peldaños de la escalera, de los edificios viejos, cavernosos... Con lo trascendental/estructural sólo nos cabe movernos en círculo, pidiendo demasiado el principio.

En resumen, leer, legere, legein: tener la capacidad de no coleccionar los datos, ¿integrarlos? Des-decir el texto. Esto es imposible, es verdad: pues la "tradición" pertenece al "conformismo", sólo es una parte de la tradición, no hemos definido lo que es tradición, ni el valor malamente metafórico de ciertos términos: tradición, progreso, autoridad, democracia... Aunque "legitimidad" satisface a todo el arco parlamentario, ¿o no? Nadie quiere quedarse "fuera de la legitimidad".

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